Los valores que sostienen nuestra visión son: la Familia, el Compañerismo, el Entrenamiento y la Adoración. Cada uno de ellos refleja aspectos esenciales de la vida cristiana y del propósito de la iglesia de Cristo en el mundo.
Los pilares de nuestro trabajo ministerial son: los Cultos de Adoración, el Discipulado, las Redes Ministeriales, la Iglesia de Niños, la Escuela de Ministerio y el Ministerio de Finanzas y Mayordomía. Creemos que el servicio fiel en cada una de estas áreas nos permite avanzar hacia una vida de mayor madurez espiritual y efectividad en nuestro servicio al Señor.
La adoración comunitaria es un pilar esencial en la vida de todo creyente. Sabemos que ningún cristiano crece de manera aislada; por eso valoramos profundamente la comunión del cuerpo de Cristo reunido en torno a Su presencia. Nuestros cultos incluyen los elementos fundamentales de la liturgia cristiana bíblica: la oración, la alabanza, la comunión y la predicación de la Palabra de Dios. Creemos que todo creyente debe comprometerse con una iglesia local, para crecer, servir y glorificar a Dios junto a otros.
Entendemos el discipulado como el proceso mediante el cual el Espíritu Santo nos transforma y nos conforma cada vez más a la imagen de Cristo. En este proceso son esenciales el estudio profundo de la Biblia, el entrenamiento en los dones espirituales y la formación del carácter cristiano. Nuestro deseo es ver creyentes maduros, firmes en la fe y útiles en las manos del Señor.
Las Redes Ministeriales son espacios de crecimiento, compañerismo y lealtad. En ellas compartimos la vida cristiana con nuestros pares, aprendemos juntos, nos animamos mutuamente y fortalecemos los lazos de unidad dentro del cuerpo de Cristo. Estas relaciones saludables contribuyen al crecimiento personal de cada creyente y al fortalecimiento espiritual de toda la iglesia. Las Redes Ministeriales de nuestra iglesia son: Hombres, Mujeres, Jóvenes y Adolescentes, Matrimonios y Red Mayor.
La formación de las nuevas generaciones es uno de los pilares más importantes de nuestra visión. Creemos que enseñar a los niños a conocer, amar y servir a Dios es una responsabilidad sagrada y urgente para la iglesia en todo tiempo, especialmente hoy. Nuestro anhelo es transmitir el testimonio de la fidelidad de Dios de una generación a otra, asegurando que los niños de hoy lleguen a ser discípulos fieles que continúen extendiendo el Reino de Dios.
La Escuela de Ministerio de la Iglesia Vida y Familia nace con el propósito de profundizar en el conocimiento de Dios y fortalecer la formación de hombres y mujeres que desean servirle con excelencia. Nos motiva el estudio de una teología conservadora y bíblicamente fundamentada al 100%, junto con la adquisición de herramientas prácticas que preparen integralmente a cada creyente para el servicio a Dios en todas las áreas de la vida. Nuestro lema es “Para conocer más a Dios y servirle mejor”.
El Ministerio de Finanzas y Mayordomía tiene como misión glorificar a Dios mediante una gestión responsable, transparente y diligente de los recursos financieros de la iglesia. Con base en los principios de la mayordomía bíblica, este ministerio promueve la fidelidad en la administración, fomenta una cultura de integridad y enseña a los miembros a honrar a Dios con sus bienes.
